"Cuando le explicas a alguien de tu alrededor que tienes un problema de adicción al juego, muchas veces te comentan...ostras, qué raro, un tío tan inteligente como tú.....Y ahí detectas que mucha gente que está a tu alrededor no entiende que la ludopatía es una enfermedad, que da igual que seas listo o tonto, inteligente o torpe, que tengas estudios universitarios o que seas analfabeto.....Evidentemente, hay muchos factores que influyen, pero no es tan fácil como "estás enganchado porque tú así lo has querido, nadie te ha obligado". Ojalá se pudiera resolver tan fácilmente...."
Después de la tempestad viene la calma.
Después de la terapia uno se encuentra muy "vigilado" y todo parece más sencillo, porque, aunque queramos jugar (no es mi caso), tenemos a nuestro familiar/pareja que nos está controlando nuestros gastos y hay que justificar todo al milímetro para no tener ningún tipo de tentaciones...La verdad es que es genial, ya que te ayuda muchísimo a dejar de jugar de golpe, y a poder sobrellevarlo. No quiero ni pensar la de veces y veces y veces (más de cien seguro, no exagero) que me he dicho: este mes dejo de jugar.....y nunca podía hacerlo.
Ahora hace 6 meses que acabé la terapia de grupo, todavía tenemos encuentros de seguimiento (ahora ya toca dentro de seis meses), y mi madre empieza a no estar tan encima mío con respecto al control económico (al menos, eso es lo que me parece). Para mí, cada minuto que paso sin jugar (y sin intención ni pretensión de hacerlo) es una batalla ganada, cada día que pasa agradezco a mi familia, a mis amigos, a mi gente, a mi doctora, al hospital de Bellvitge, a la sanidad pública en general, etc, que me hayan dado la oportunidad de volver a ser quien era, porque....quién no merece una segunda oportunidad?
Cada día que pasa es una guerra superada.
Y me siento bien, y me siento orgulloso del trabajo que estoy realizando, y de la gente que me rodea y que se preocupa por mí, y me siento en condiciones de rehacer mi vida, de formar una familia, de ser una persona normal, como el resto, con mis más y mis menos, pero sin tener que estar expuesto continuamente a la pena de muerte que es el juego....
Esa es la actitud que tenemos que tener. Y esto se puede extrapolar a cualquier tipo de problema. La cuestión es trabajar, luchar por algo en la vida, sin dañar a los demás, dar sin esperar nada a cambio, agradecer a quien corresponda, que somos unos privilegiados por poder sentir, por poder reir, por poder llorar, en definitiva....por poder VIVIR
Hola amigo,, la adicción no distingue ni edad, ni sexo y mide el cerebro.
ResponderEliminarNi tampoco entiende de clase social.
Un saludo!
Completamente de acuerdo, Boni. Un saludo.
ResponderEliminarOjalá encuentres a alguien que te respete y te quiera como te mereces y no te abandone como lo hizo Eva. Te mereces lo mejor.
ResponderEliminarMuchas gracias Anónimo. No tengo la sensación de que Eva me abandonara, probablemente se asustó en demasía y no pudo o no supo soportar la presión...
ResponderEliminarOjala ella pueda algún día pensar así.
ResponderEliminarGracias anónim@, eso mismo pienso yo, día tras día, pero ya no depende de mí.
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