28 - Un día cualquiera

"Hace varios años, una tarde que me encontraba jugando en un bar, uno de los clientes que allí estaba se dirigió al dueño del bar y le dijo: cada vez que alguien aprieta el botón de jugar en la máquina tragaperras tendría que darle una descarga eléctirca..... En el momento no me hizo ninguna gracia. A día de hoy, cuando veo a alguien enganchado en las máquinas, se me pone el cuerpo malo, siento rabia y lástima a la vez. Me gustaría que cada vez que esa persona apretara al botón de jugar, le diera una fuerte descarga eléctrica..."

Me levanto por la mañana. Tengo sueño y me siento cansado, debe ser la primavera....Después de asearme y sacar al perro a pasear, cojo el coche y me dirijo al trabajo. Afortunadamente mi puesto de trabajo no corre peligro de ningún tipo, y eso me hace sentirme relajado en ese sentido. A media mañana bajo a desayunar. Siempre voy al mismo bar, junto con algún compañero. Mientras me como el bocadillo aprovecho para ojear el periódico. De repente alguien se pone a jugar en la máquina tragaperras. Normalmente suelo colocarme de espaldas a ella, supongo que inconscientemente, no lo hago a propósito. El caso es que mi cerebro todavía detecta el ruido de las monedas cayendo, y las infames melodías que emergen de los altavoces. Volvemos al puesto de trabajo a contnuar con la tarea. Salgo de la oficina y marcho a casa a comer. 

Después de comer me echo la siesta. Me despierto a media tarde, paseo con mi perro y quedo con Pedro para ir a correr y despejar cuerpo y mente. Vuelvo a casa, me ducho y me dispongo a preparar la cena. Hay partido de futbol en la televisión. Me gusta ver los partidos por la tele, pero con el sonido de la radio, le da más emoción. Un porcentaje muy alto de equipos de futbol últimamente llevan publicidad en sus camisetas de casas de apuestas online, a la vez que también se pueden observar anuncios en el terreno de juego relacionados con lo mismo. Algo en mi subconsciente me hace advertir esa circunstancia, que otra gente no ve. La retransmisión radiofónica se interrumpe continuamente con anuncios, de los cuales más de un 50% tienen que ver con casas de apuestas online o páginas web donde se juega a póker, y uno puede "disfrutar y ganar mucho dinero". Hace unos meses me molestaba en exceso el continuo bombardeo. Hoy casi ni me doy cuenta. 

Finaliza el partido y, después de dar una vuelta con el bicho me dispongo a acostarme, no sin antes encender el ordenador, revisar el correo electrónico, facebook, actualizar este mi blog, y participar en algún que otro foro. Durante el período que dura esta operación en el ordenador (alrededor de una hora aprox, en función de si me encuentro más o menos inspirado o espeso...), recibo varios enlaces en forma de ventanas emergentes, sobre casas de apuestas online, casinos online, máquinas tragaperras online, póker online....Admito que cada vez que me salta algo de esto me molesta, me indigna, mas no muestro ningún signo de debilidad ni curiosidad al respecto (faltaría más!!). Cierro el ordenador, enciendo la radio o bien cojo un libro para relajarme, y a dormir. Mañana será otro día.

Detecto que, a lo largo del día, hay situaciones potencialmente peligrosas, que actualmente las tengo completamente controladas, pero que están ahí. Eso me recuerda que no puedo dejar de trabajar para que mi subconsciente no se relaje nunca y me gaste una mala pasada. Se confirma que es imposible olvidarte de  algo así de la noche a la mañana

De otro modo, detecto que estoy superando mi enfermedad, estoy superando la adicción al juego patológico que tengo. Poco a poco dejaré de escuchar las máquinas tragaperras en los bares, poco a poco dejaré de fijarme en la publicidad positiva que todos los medios hacen sobre el paquete de "apuestas online", poco a poco.....sin prisa pero sin pausa...